miércoles, 29 de octubre de 2014

La Constancia

La constancia, una cualidad que me ayuda a conseguir lo que quiero, con la que me siento cómoda y, sin embargo, de la que me resulta difícil hablar.

El tema surge tras una conversación con uno de mis lectores que me comentaba que le gustaría ser más constante, pero ser más constante en qué. En general, me decía. “En general es muy amplio”, conviene concretar un poco más.

Según la Real Academia Española, la constancia es la firmeza y perseverancia del ánimo en las resoluciones y en los propósitos.

La firmeza y la perseverancia indican un cierto grado de esfuerzo. Los propósitos nos sugieren que hemos de tener un tema en mente sobre el que aplicar la constancia, por lo tanto, “en general” no vale.

Al igual que la caminata más larga comienza con el primer paso, el esfuerzo más grande comienza con el primer gesto. Su repetición generará el hábito que necesitas incorporar en tu vida y satisfará a tu espíritu de superación.

Y qué me dices de tu actitud, ¿te ayuda a generar nuevos hábitos?

Pero volvamos al propósito, al para qué quieres ser más constante. Qué quieres conseguir. La motivación es el abono que necesita el esfuerzo. Sin motivación y sin ilusión no hay lugar para el desarrollo, son los aliados perfectos para forjar un nuevo hábito.

La motivación te ayudará a ser más dueño de ti mismo, te ayudará a priorizar el gozo a largo plazo sobre el placer inmediato. Será la luz en la oscuridad. La motivación te hará inasequible al desaliento. La motivación te dará fuerza de voluntad.

La constancia nos hace ver que somos vulnerables, que podemos flaquear, sin embargo, “el hombre constante mira hacia delante con la ilusión de alcanzar la cima deseada y por eso se mantiene firme, inalterable.” (Enrique Rojas).

Tu visión de futuro te ayudará a sortear los obstáculos del camino y a tomar decisiones sobre lo que es mejor, o no, hacer. Te dará libertad de elección.

¿Cuál es tu cima?, ¿cuál es el futuro que quieres crear?


“Comenzar supone mucho, pero perseverar es todo.” – Enrique Rojas.




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